Hay ciertos padecimientos que de solo escucharlos nos parecen desagradables, los hongos están dentro de esta categoría, sin embargo, lo principal es comprender su aparición, no solo para prevenirla sino también para que el tratamiento y seguimiento nos genere más sentido. Nuestros peludos amigos están propensos a este problema concerniente a la dermatología veterinaria, por ello nos parece oportuno tocar este tema para que sepas más al respecto.

Para empezar, existen distintas enfermedades de la piel que pueden afectar a nuestro pequeño amigo, entre ellos las pulgas, garrapatas, y por supuestos los hongos, el médico experto en dermatología veterinaria es el que podrá evaluar y hacer un diagnóstico certero de lo que es si notas algo extraño en su piel, sin embargo, debemos ser observadores y estar atentos a cualquier cambio en nuestra mascota.

Los hongos son una afección tópica y existen distintos tipos, pese a ello podemos identificar el padecimiento con síntomas generales como una comezón constante, lo podemos percibir si nuestro pequeño peludo se rasca más de lo habitual, pérdida de pelo en algunas partes de su cuerpo, cambio de color en la piel donde no hay pelo, descamación de la piel, es decir una especie de caspa, inflamación de la piel, enrojecimiento, así como lesiones en las uñas en algunos casos. Si te percatas de alguna de estas señales será momento de acudir con el especialista en dermatología veterinaria para que determine si efectivamente es un hongo y de qué tipo.

Mientras acudes con el especialista te recomendamos tomar ciertas precauciones, ya que te enfrentas a un posible hongo que puede traer consecuencias, así que evita bañar a tu peludo amigo muy seguido, ya que esto puede hacer que se siga proliferando el hongo, como puede ser algo contagioso toma medidas para que si tienes otras mascotas no tengan contacto, incluso si hay niños en casa limitar la interacción y el uso compartido de frazadas, ropa o juguetes. Tener una buena higiene y limpieza cada vez que interactuamos con nuestra mascota, así como poner mantas en sillones o en el auto para que no haya un contacto directo.

Con respecto al tratamiento podrás encontrarte con varias alternativas, ya que depende del tipo de hongo que se diagnostique y la formación del médico en dermatología veterinaria, por ejemplo, de los más comunes están los antibióticos y corticoides, pero dicha receta solo está facultada por un profesional, otra recomendación que seguro te darán es fomentar una sana alimentación, ya que en muchos de los casos de hongos en mascotas se debe a que tienen sus defensas bajas y para calmar los síntomas están ciertas cremas antimicóticas.

Los hongos son un problema no solo para tu pequeño y peludo amigo, sino también un riesgo para ti y tu familia, ya que pueden contagiarse, así que en cuanto observes alguno de los síntomas que te compartimos es mejor acudir a una clínica veterinaria, así como tener una muy buena higiene para descartar cualquier contagio, no te preocupes es un padecimiento tratable si lo detectas a tiempo.

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