Cuando recién adoptamos a un perrito puede resultar confuso saber exactamente qué hacer respecto a la prevención de enfermedades como el famoso moquillo, en nuestra mente están las vacunas, pero cuáles y a qué tiempos tienen que aplicarse, pues te lo vamos a decir en esta publicación para que tomes note y sea más sencillo mantener sano a tu peludo. 

Antes que nada, te sugerimos preguntar si el cachorro o peludo adulto que has adoptado tiene alguna vacuna o su esquema completo, ya que puede ser contraproducente duplicar las dosis, a partir de ahí ya puedes organizarte para aplicarlas o solo poner refuerzos, por otro lado, debes acudir a una veterinaria con un especialista avalado, ellos sabrán qué vacunas aplicar y en qué tiempos, incluso te dan una cartilla donde van registrando cada aplicación, las subsecuentes y en qué fecha se requieren, sin embargo, no está demás que tengas en mente esta información. 

Considera que los peludos más pequeñitos se vacunan a partir de las 6 semanas de nacidos, incluso, puede ser un poco después y debes considerar que mientras se complete el esquema de vacunación los cachorros no pueden tener contacto con otros perros, pues los pone en una situación vulnerable de contagio, sobre todo de padecimientos como el parvovirus o el moquillo, de hecho, estas son las primeras vacunas que se aplican.

De manera resumida a las seis semanas se aplican vacunas del virus del moquillo y parvovirus; a los dos meses la vacuna polivalente, que abarca nuevamente estas últimas dos más la de la influenza, la hepatitis y la leptospira; a los tres meses se aplica el refuerzo de esta vacuna polivalente. Posterior a ello, a los cuatro meses, otra vez un refuerzo de la vacuna polivalente, añadiendo la vacuna contra la rabia. Este último combo se vuelve a aplicar al año. Procura aplicar las vacunas cuando está estipulado, ya que de no hacerlo puede afectar su efectividad y no queremos arriesgarnos. 

Esta es la guía sencilla y práctica de la vacunación de nuestros peludos, recuerda que es importante cumplir con el esquema básico, ya que eso nos ayudará a prevenir que los pequeños amigos adquieran enfermedades que puedan ser, incluso, letales, como el moquillo o el parvovirus y por supuesto que no queremos que eso pase. 

Considera que mientras tu peludo recibe todas las vacunas debes mantenerlo alejado, ya que sacarlo en lugares donde han estado o hay perros puede ser un foco de infección para que se contagien de alguna enfermedad, solo vas a hacer, sobre todo para que se acostumbre a los ruidos de la calle o lugares públicos, procura mantenerlo en los brazos o en algún bolso donde no tenga contacto con superficies donde puede haber virus. 

Otro dato a considerar es que mientras los cachorros son lactantes es mejor no vacunarlos, ya que estas sustancias pueden influir en los anticuerpos que la madre les pasa a través de la leche y afectar su efectividad. 

Por último, recuerda que no hay mejor medicina que la prevención.