La medicina veterinaria tiene diferentes campos que nos ayudan a tratar los padecimientos de nuestros pequeños amigos, no estamos exentos de que en algún momento necesitemos de algún tratamiento especializado para hacer que nuestra mascota esté mejor. Una de esas áreas es la fisioterapia veterinaria, que en publicaciones pasadas hemos explicado de manera general, recordemos que esta especialización tiene la finalidad de normalizar las funciones de alguna parte del cuerpo de nuestro peludo mediante terapias de estimulación, adaptación y regulación. Comúnmente se utilizan cuando hay alguna dificultad motriz en nuestra mascota. Es muy importante que antes de tomar la decisión de someterlo a un tratamiento de este tipo se realice una evaluación clínica, ortopédica y neurológica, ya que es lo que dará la pauta para corroborar si es lo que se necesita, de lo contrario podría se contraproducente.
Ahora, existen diferentes tipos de fisioterapia veterinaria, de las más reconocidas está el masaje, que es utilizado para regular la tonicidad muscular, mejorar la función de las articulaciones, disminuir la tensión muscular producida por una lesión espina, además de que ayuda a preparar a tu mascota para otras estrategias de rehabilitación. Dentro de este tipo de fisioterapia se encuentran ciertas técnicas como la fricción, la caricia, palmadas, agitación, pellizco, sí tal cual como cuando nosotros vamos al spa, pero esto con fines clínicos y especializados, aunque no está de más llevar a nuestro pequeño amigo por el puro gusto de consentirlo.
Otra de las formas de las que se vale la fisioterapia veterinaria es la estimulación eléctrica, vaya se escucha un poco fuerte, pero no te preocupes es una técnica totalmente avalado y controlada, ya que dependiendo de la lesión es la intensidad y la frecuencia de dicha estimulación, es útil para tratar las lesiones ortopédicas y neurológica, sobre todo las que provocan dolor o atrofia muscular. Para cambiar a una técnica más agradable está la terapia acuática, como sabemos nuestro cuerpo soporta menos peso dentro del agua, esto contribuye a que tu peludo amigo pueda tener una estimulación física confortable, esta versión de fisioterapia tiene varias propiedades como la reducción de la inflamación, los edemas, el fortalecimiento muscular y cardiovascular.
Seguro has escuchado que cuando tienes una lesión como los tobillos, utilices algo caliente y luego algo frío, pues ese también es un tipo de fisioterapia veterinaria y se llama termoterapia, consiste en utilizar elementos físicos con calor y frío en el área a tratar, así el choque de temperaturas alivia el dolor, reduce el espasmo muscular, se utiliza generalmente en el tratamiento de artritis e inflamaciones.
Nos gusta que cada vez conozcas más sobre veterinaria clínica, eso te ayuda a comprender más los tratamientos que puede requerir tu mascota, solo no olvides que cada una de estas estrategias debe ser aplicada por un profesional, un médico veterinario que conozca sobre esta especialidad, ya que el “hágalo usted mismo”, puede traer consecuencias no deseadas para nuestros pequeños y adorados amigos peludos. Cualquier duda acércate a Mr. Can.
Referencia: http://www.colvema.org/PDF/1417Rehabilitaperros.pdf
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